viernes , 27 junio 2025
Emprendimiento

¿CÓMO FORMAR CORRECTAMENTE EL PRECIO DE VENTA?

La correcta formación del precio de venta es un punto clave para cualquier empresa, estando directamente ligado al resultado o pérdida del negocio. A pesar de ser un factor fundamental para el emprendimiento, en la práctica la fijación de precios suele ser un desafío constante para los directivos.

Consiste en definir un valor a un producto o servicio en el momento de su lanzamiento o por una necesidad de adaptación al escenario económico. Fijar el precio de venta es mucho más sencillo si tu empresa cuenta con un sistema de control de producción.

El cálculo da como resultado la siguiente fórmula: costo + gastos + margen de utilidad = precio de venta. En un principio puede parecer sencillo, pero la complejidad radica en el cálculo de cada uno de estos ítems, ya que involucran varias variables.

Para empezar a familiarizarse con el tema, es necesario comprender el significado de todos los elementos siguientes:

Costo: Se refiere al valor que el producto en sí le costó a la empresa. Sin embargo, el error más común a la hora de calcular el precio de venta es tener en cuenta únicamente el coste bruto del producto, dejando de lado los costes indirectos, que son fundamentales a la hora de fijar el precio.

Un costo indirecto es aquel que no puede definirse como específico de una etapa de producción. Ejemplos claros son las facturas de luz, agua, alquiler. ¿Cuánto representa cada sector de estos valores mensuales? Para ello, es necesario crear prorrateos de cuentas por etapas de producción o, en el caso de empresas de servicios, por sectores involucrados en la venta.

En este post hablamos un poco más de la importancia de costear correctamente un producto.

Gastos: aquí se suman todos los gastos variables y fijos necesarios para mantener la estructura y actividades de la empresa. Este rubro incluye comisiones por ventas (si las hubiera), pagos por internet y pagos de sectores no involucrados directamente con las ventas, por ejemplo.

Margen de beneficio: Luego de identificar los costos y gastos del producto, se puede definir el margen de ganancia, que es la cantidad que la empresa obtendrá de cada venta.

Ahora que ya sabes qué significa cada ítem necesario para la definición, presta atención a algunos detalles que también influyen directamente en este proceso:

Régimen fiscal: El tipo impositivo sobre el producto variará dependiendo del régimen fiscal de cada empresa, y tiene una influencia considerable en la formulación del precio del producto. Es importante tener en cuenta, como cada régimen fiscal tendrá un cálculo diferente, consulta esta información con tu contador.

Análisis de la competencia: No es posible establecer el precio de venta sin analizar primero la competencia. Para que tu negocio sea competitivo la premisa es que tu precio de venta esté dentro del promedio del mercado. Si es superior, hay que comprobar la viabilidad y revisar los cálculos, en función de la reducción de costes, gastos o margen de beneficio. Aquí conviene recordar que aspectos como la calidad, el alcance de la marca y el tiempo en el mercado también influyen en el precio.

Punto de equilibrio: El punto de equilibrio es una guía importante para definir el precio de venta, especialmente a la hora de determinar el margen de beneficio. Es el monto de ventas necesario para cubrir costos y gastos, sin tomar en cuenta ganancias ni pérdidas.

Método de costeo: Adoptar una metodología de gestión de costos es esencial para formular precios de venta. Los principales métodos son el costeo de absorción, el costeo variable y el costeo estándar. Cada uno tiene sus puntos positivos y negativos, pero el único que es válido a efectos contables es la Absorción. Incluye costos directos, indirectos, fijos y variables, cubriendo íntegramente todos los costos involucrados en la producción.

Utilizando estos lineamientos ahora es posible tener una idea más clara de cómo formular el precio de venta de los productos de manera consistente y estratégica, así como tomar decisiones más asertivas. A la hora de ponerlo en práctica, contar con ayuda profesional puede acortar el camino y anticiparnos a los problemas.

La importancia de comprender la formación del precio de venta.

No es una tarea fácil calcular el precio de un producto o servicio. Es necesario analizar los costos involucrados, adaptarse a las prácticas del mercado y también sumar el beneficio esperado. Sin embargo, esta comprensión es necesaria, considerando que es lo que garantizará las ventas y los resultados comerciales.